
Llegó el presidente
y mandó parar
24.03.2022 Texto: Carlos Schiaffarino
Este 27 de marzo se convoca a toda la ciudadanía a que haga uso de su derecho más importante: el voto. El derecho al voto es inherente a la condición de ciudadana o ciudadano. Así lo establece a texto expreso el art. 77 de la Constitución: «Todo ciudadano es miembro de la soberanía de la Nación; como tal es elector y elegible en los casos y formas que se designarán».
En esta oportunidad lo hace a través de un referéndum. El referéndum, por su parte, es un mecanismo por el cual la ciudadanía puede manifestarse en contra de una ley previamente aprobada por el parlamento uruguayo. Este mecanismo difiere del plebiscito, que es el mecanismo por el cual las personas habilitadas son convocadas para decidir si se aprueba o no un proyecto de reforma constitucional.
A lo largo de nuestra corta pero rica historia democrática, se han sucedido una importante cantidad de plebiscitos y referéndum. Todas han tenido su importancia porque logran por un mecanismo directo y democrático discutir y decidir sobre cuestiones que se plantean como importantes para la ciudadanía.
En esta convocatoria también es así. Solo con recordar como se llega a esta instancia electoral demuestra la importancia que tiene para la población estos temas planteados en 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración, votada en el Parlamento al inicio del mandato del presidente Lacalle Pou coincidente con el inicio de la Pandemia.
Se llega a esta instancia luego de que cerca de 800 mil personas a través de su firma, su huella digital y su voluntad interpusieron este mecanismo. Todo esto demuestra lo democrático, lo importante, lo necesario de esta discusión y esta decisión.
Lamentablemente el gobierno, y seguramente el mismo presidente ha llamado a no debatir, a no discutir, a no comunicar las «bondades» de esta ley. Esto ha generado que a pocos días de referéndum miles y miles de uruguayos y uruguayas no estén enterados de que este domingo 27 se vota obligatoriamente. Miles y miles de uruguayos no saben el contenido de los 135 artículos a derogar, menos aún de los cientos de artículos que no están a consideración. Esto no ha permitido que la ciudadanía vea, analice, y valoré los dos puntos de vistas, y luego decida su voto.
Uno de los grandes responsables de esta desinformación es el gobierno, que una y otra vez no participa de debates ya acordados y agendados. Esta responsabilidad es también de los medios de comunicación que han generado un verdadero bloqueo informativo con estos temas desde el inicio de la campaña de recolección de firmas hasta los días previos al referéndum.
En un estudio realizado por el Monitor de Medios de la Universidad de la República se seleccionaron cinco portales informativos: El País, la diaria, El Observador, Montevideo Portal y Subrayado. Los tres primeros se seleccionaron por ser los diarios de alcance nacional más leídos. Se tomó además un medio nativo digital (Montevideo Portal) y el portal de informativo de televisión que se actualiza con mayor frecuencia (Subrayado).
Un resultado llamativo en este sentido es la poca aparición de contenido de los artículos a derogar: sólo el 9,8 % de las notas refieren directamente a la ley o sus temáticas -como el precio de los combustibles, educación o seguridad- y no se halló ninguna noticia que citara el texto de la ley, ni que validara o refutara declaraciones yendo al articulado en discusión. Asimismo, la escasa aparición de fuentes documentales, como bien podría ser el texto de la ley en sí, o la poca consulta a expertos en el tema, da cuenta de una cobertura mayormente declaratoria.
Otro hallazgo del estudio, quizás no tan llamativo, es el desequilibrio: se comparó cuántos minutos se destinaron a informes periodísticos relativos al sí, y cuántos minutos se destinaron a informes periodísticos relativos al no. Se constató que la campaña del no tuvo casi el doble de minutos de cobertura que la campaña del sí en los tres informativos de alcance nacional en la segunda quincena de febrero: 95 minutos y 57 segundos para el no, y 50 minutos y 37 segundos para el sí.
Pese a esta intención del Gobierno y los Medios por no informar, no debatir, ni analizar, este domingo 27 iremos todos y todas a votar entre otras cosas recordando a nuestro padre Artigas: «Mi autoridad emana de vosotros y cesa ante vuestra presencia soberana».